"López Obrador ganó"
- Alberto Ortiz
- 10 mar 2016
- 2 Min. de lectura
Esta semana se supo que la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó a la Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral (INE) bajar el spot de Andrés Manuel López Obrador, dirigente de Morena, en el que afirma que la compra del avión presidencial no lo tiene ni Obama y que en 2018 lo venderían.

Lo anterior tiene que ver con el derecho que gozan los partidos políticos de tener tiempos en radio y televisión para difundir su ideología o posicionamiento con respecto a un tema de interés nacional.
De acuerdo con el artículo 136 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ningún funcionario público puede realizar propaganda personalizada. López Obrador no es funcionario federal sino dirigente de un instituto político y resulta inaplicable esta disposición, entonces, si no estamos en periodo de precampañas, campañas, ni es funcionario, ¿por qué echaron abajo su promocional?
La Sala Superior afirma que “ha hecho énfasis en que si los promocionales denunciados predomina la voz, imagen y nombres de determinados sujetos, es claro que son a éstos a los que se pretende posicionar”, esto con referencia al discurso de Andrés Manuel en el que dice “no quieren que se escuche mi voz, ni quieren que aparezca en televisión, me quieren borrar; mientras tanto les informo que los políticos transas se roban 500 mil millones de pesos cada año…ya compraron un avión presidencial, de lujo, (…) no lo tiene ni Obama (…) en 2018 lo vamos a vender…”.
El hecho de que aparezca todo el tiempo el dirigente de Morena y diga una fecha (que coincide con las elecciones para elegir al presidente de la República), es motivo para sacarlo de la radio y televisión porque “hace un uso indebido de la pauta; viola el modelo de comunicación política y sobreexpone la imagen de López Obrador”.
¿Y los spots de Ricardo Anaya? Prácticamente incurrían en los mismos términos, ¿a poco no?
Si retrocedemos más en el tiempo, Julio Juárez Gámiz, investigador del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), hizo un recuento de varias acciones anticipadas de campaña como la promoción encubierta en medios de comunicación que hacían referencia a los logros de Enrique Peña Nieto, entonces gobernador del Estado de México. Ahí era evidente la violación al artículo 134 del texto constitucional, y como diría Jaime Maussan, “y nadie hizo nada”.
¿Y qué me dicen de la propaganda de Manuel Velasco Coello, gobernador de Chiapas, que llegó hasta nuestra Ciudad de México? Ello era también motivo de sanción, pero tampoco nadie hizo nada.
A pesar de que no comparto la política lopezobradorista, el “Peje” logró que no escucharan su voz y que ni apareciera en televisión; le salió bien la jugada porque ahora se ha puesto nuevamente en la agenda semanal, mandó un mensaje con miras a las elecciones de 2018 y hasta sacó un nuevo spot… con el mismo tema, el mismo tono y la misma cantaleta.
Restaría preguntar, ¿desde ahora se comenzará con la lucha para evitar que cierto personaje “sea un peligro” en los próximos comicios federales? ¿Y la imparcialidad? Se pone bueno el asunto, ¿apoco no?